Hasta ahora, la mayoría de los materiales utilizados en la construcción terminan en el vertedero. Gran parte de ellos no son biodegradables, y por tanto perjudiciales para el medio ambiente. Esto obliga a arquitectos e interioristas a replantear soluciones sostenibles. Veamos qué materiales podemos utilizar para ello.
Corcho
Es el rey de los materiales biodegradables. Es reciclable y renovable, ya que el corcho es el único árbol que regenera su corteza y no le perjudica que su material sea cortado. Además, tiene un peso muy ligero, es un excelente retardante térmico, aislante acústico y es resistente al agua. Además, es estéticamente muy atractivo, ya que permite aportar tonos cálidos, terrosos y moteados a las construcciones; sin tener que añadirle ningún otro ingrediente. Toda una joya de los revestimientos naturales sostenibles.
Madera
Utilizada con moderación y con certificación de bosques gestionados, la madera es una de las soluciones arquitectónicas más sostenibles disponibles. Es un material que puede ser transformado para mejorar sus características, por ejemplo, con tableros contrachapados o alistonados, incrementado de forma sustancias sus propiedades físicas y haciéndolo adecuado para múltiples aplicaciones técnicas y decorativas.
Caucho
Procedente del reciclado de productos como neumáticos o bandas transportadoras. Se le ofrece una segunda oportunidad para ser utilizado en arquitectura e interiorismo, tanto como amortiguador de impacto y sonido, como decorativamente para aportar un aspecto más industrial.